Infección vírica sumamente contagiosa que causa fiebre, dolor de cabeza, dolorimientos corporales, cansancio extremo, dolor de garganta y otros síntomas.
El caso de José
José no se siente bien, pero a pesar de ello decide asistir a clase. Tose, estornuda y empieza a sentirse muy cansado. Durante el almuerzo, varios amigos le preguntan qué tal se siente.
Al contestar, estornuda bruscamente. Esto sucede tan de improviso, que no tiene tiempo de cubrirse la nariz con la mano. Ninguno de los amigos ve ni siente las gotitas microscópicas que expele la nariz de José a una velocidad de 150 kilómetros por hora. Tampoco son conscientes de los virus contenidos en esas gotitas que respiran con el aire atmosférico.
A la mañana siguiente, José no aparece por la escuela. El médico dice que tiene gripe (llamada también influenza).
Durante un par de días, los amigos de Joseph siguen sintiéndose bien. Pero el virus que inhalaron se propaga por su organismo, se fija a la superficie de las células sanas y las infecta. Luego, una mañana los amigos de José despiertan con fiebre y golpes de tos. A las pocas horas, se sienten como si hubiesen perdido todas las fuerzas. Ellos ahora también tienen gripe.
Algo más que un fuerte resfriado
La gripe es una infección vírica de las vías respiratorias, en las que están incluidas la nariz, la boca, la garganta y los pulmones. Aunque hay quien llama gripe a cualquier resfriado fuerte, es una afección distinta del resfriado común.
La gripe se propaga por el aire y es fácil de contagiar. Y si bien la mayoría de la gente sana que sufre de gripe se recupera totalmente, a veces esta infección puede ser mortal, sobre todo si la persona tiene neumonia o algún problema clínico subyacente. Por lo regular, la vacuna previene esta infección.
Así y todo, alrededor de 20 000 estadounidenses mueren anualmente de gripe o de sus complicaciones. La infección suele contraerse en invierno o a principios de primavera, que es cuando se pasa más tiempo en lugares cerrados y en contacto con otras personas. La gripe afecta a todas las edades, pero en especial a la gente mayor y a los que padecen problemas crónicos de salud.
Tipos de gripe
El virus de la gripe presenta tres variedades o tipos: A, B y C. El virus del tipo A es el más peligroso para el ser humano, porque tiende a mu-tar cada varios años o a transformarse en nuevas cepas capaces de infectar a las personas. Los seres humanos poseen la facultad de combatir los virus que encuentran, sobre todo si han tenido previamente una enfermedad infecciosa como la gripe.
Pero cuando aparece el virus de la gripe de tipo A, el sistema inmunitario del organismo humano está menos preparado que de costumbre para combatirlo. Esto puede dar lugar a epidemias como la de 1916 a 1918, en la que fallecieron 500 000 personas en Estados Unidos y 20 millones más en el resto del mundo (véase el comentario al margen de la página siguiente).
El virus del tipo B también puede acarrear graves consecuencias, pero no cambia su estructura tan rápidamente como el tipo A. El virus de la gripe tipo C causa formas más benignas de gripe y es mucho menos frecuente que el tipo A o el tipo B.
¿Cómo se propaga la infección?
Las secreciones respiratorias (flema y moco) de la persona infectada contienen el virus, que se propaga al estornudar o toser. Hasta el aliento exhalado contiene a veces las gotitas microscópicas que albergan el virus.
La infección puede difundirse de muchas maneras cuando la persona—José, digamos—estornuda en proximidad de otras o cuando el aire de un ambiente cerrado se recicla mediante los sistemas de calefacción y refrigeración por aulas, oficinas o el interior de aviones.
El virus se puede propagar incluso tocando la manija o picaporte de una puerta que ha tocado una persona infectada y seguidamente restregarse la boca, la nariz o los ojos.
Cuando alguien inhala el virus, éste entra en el torrente sanguíneo y empieza a atacar a las células sanas. Para multiplicarse, el virus utiliza la capacidad que tienen las células de producir proteínas, que le permiten atacar no sólo a la célula que ocupa sino también a las circundantes.
Estas invasiones celulares desencadenan la respuesta del sistema inmunita-rio, que envía glóbulos blancos (leucocitos) a combatir al virus. Uno o dos días después de la exposición al virus, los individuos afectados empiezan a manifestar indicios de gripe.
Signos y síntomas
El día después de experimentar los primeros síntomas de la gripe en la escuela, Joseph se despierta y se encuentra con que no puede levantarse de la cama. Tiene fiebre elevada—de 38,9 a 40 °C (102 a 104 °F)— escalofríos, y la cabeza, músculos y todo el cuerpo adoloridos. El pecho está congestionado, como si le hubieran puesto encima unos cuantos ladrillos. Le duele la garganta y de cuando en cuando tose.
El virus de la gripe combate las defensas del organismo. La fiebre y los dolores representan la lucha que sostiene el cuerpo por contenerlo y destruirlo. Los glóbulos blancos producen una proteína llamada inter-leucina, que da lugar a dolorimientos, fiebre y cansancio, hasta que por fin el virus queda eliminado.
A menudo la fiebre se resuelve en el plazo de 5 días. Otros síntomas empiezan a desaparecer a la semana, pero el cansancio puede durar a veces 2 o 3 semanas.
La gripe se transforma a veces en neumonía o bronquitis. La neumonía es una infección de los pulmones, que ocasiona inflamación y a veces acumulación de líquido. Esto interfiere con el paso del oxígeno a la sangre y puede a veces ocasionar la muerte. En la bronquitis, las vías respiratorias pulmonares de mayor calibre (los bronquios) también se inflaman.
Diagnóstico y tratamiento
Para diagnosticar la gripe, los médicos se basan en los síntomas. Muchos virus causantes de resfriados pueden dar lugar a síntomas parecidos a los de la gripe, pero por lo general no son tan pronunciados ni duran tanto.
El tratamiento consiste en guardar cama y beber líquidos en abundancia para evitar la deshidratación. La fiebre, los dolores y la tos pueden aliviarse con remedios de venta libre, pero conviene evitar la aspirina durante la gripe u otra infección vírica, por su relación peligrosa con el síndrome de Reye.
Una inyección preventiva
Ciertas cepas de gripe pueden prevenirse mediante la vacuna antigripal, administrada en el otoño. Esta vacuna contiene versiones inactivas de los virus que, según los investigadores, tienen mayor probabilidad de causar la gripe en los meses venideros de invierno y principios de primavera.
Puesto que el virus de la vacuna ha sido inactivado, no es posible contagiarse de gripe por culpa de la inyección. El virus inactivado estimula al organismo humano a producir anticuerpos. Cuando un virus activo (vivo) invade el organismo, los anticuerpos están preparados para impedir que se fije a las células y las infecte.
La vacuna no garantiza la inmunidad contra la gripe, pero sí es eficaz en el 70 al 90 por ciento de los casos cuando su composición corresponde acertadamente con la cepa del virus causante.
Se recomienda especialmente la vacunación antigripal para personas de grupos de alto riesgo, tales como los ancianos y los enfermos del corazón o de los pulmones. A los niños se les puede vacunar también, pero pocas veces reciben la inyección, a menos que tengan problemas clínicos como la diabetes, infección por VIH, enfermedades del corazón o afecciones pulmonares como el asma. En ocasiones, las personas expuestas a la gripe reciben medicamentos antivíricos como la amantadina.
Otras medidas preventivas consisten en evitar el contacto con personas infectadas y el lavarse bien las manos para evitar la transmisión del virus.
Fuentes
American Lung Association, 61 Broadway, 6th Fl.,
New York, NY, 10006 Telephone (212)315-8700 Toll-Free (800)LUNGUSA http://www.lungusa.org
U.S. Centers for Disease Control and Prevention,
1600 Clifton Rd., Atlanta, GA 30333 Telephone (404)639-3534 Telephone (404)639-3311 Toll-free (800)311-3435
Information Hotline (888)-232-3228
Public Health Emergency Preparedness & Response
(888)-246-2675 (English)
Public Health Emergency Preparedness & Response (888)-246-2857 (Spanish)
Public Health Emergency Preparedness & Response TTY 866-874-2646
Office of Public Inquiries (800)311-3435 TTY (404)639-3312 http://www.cdc.gov/
KidsHealth.org, c/o Nemours Foundation, PO Box 5720,
Jacksonville, FL 32247 Telephone (904)390-3600 Facsimile (904)390-3699 http://www.kidshealth.org/